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no hacemos cambios por talle por eso es importante que midas bien tu talle comparandolo con esta tabla 👇🏻

Gustavo Adolfo Costas no es solo parte de la historia de Racing Club: es Racing hecho persona.

Desde aquel niño de tres años, con el corazón latiendo al ritmo del equipo de Pizzuti en 1967, hasta el hombre de canas y lágrimas sinceras que pidió perdón frente a todo un pueblo académico, su vida y la de Racing fueron siempre una misma línea celeste y blanca.

Costas estuvo cuando Racing fue gigante y cuando fue herido.

En cada golpe y en cada renacer, ahí estaba él, poniendo el pecho, la voz y el alma.

Cuando muchos se escondían, Gustavo daba la cara.

Cuando el club necesitaba manos, él ofrecía las suyas.

Costas fue mascota, jugador y director técnico. Pero por sobre todo, hincha. 

Fue el niño de la ilusión, el joven del sacrificio y el hombre del compromiso.

La Copa Sudamericana de 2024 y la Recopa de 2025 no fueron solo títulos: fueron la reivindicación de una historia, la confirmación de que el amor también puede ganar.

Porque Costas es el reflejo de cada hincha en la tribuna, de cada lágrima derramada, de cada sueño postergado.

Gustavo Costas no defraudó a nadie.

Nos devolvió la ilusión, el orgullo y el lugar que siempre merecimos tener.

Porque Racing y Costas son una misma cosa:

el amor incondicional que no se explica,

la pasión que no se negocia,

la fe que resiste todas las tormentas.

Gustavo Costas es Racing, y así será por toda la vida.